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Reivindicaciones (V)

Tengo un amigo que es un adicto del deporte y se apunta a todas: Maratones (o medias maratones), triathlones, carreras de bicicletas…pero reivindica algo (sigue un poco el hilo de la primera reivindicación):
Mujeres guapas en las manifestaciones deportivas YA!

Reivindicación (IV)

Tengo un amigo que reivindica la baja de precios de las tapas en Zaragoza. Demonios, no hay manera de irse de tapeo sin dejarse un riñón en el intento!

Reivindicaciones (III)

Vamos a seguir el hilo y la nueva reivindicación que nos ha llegado es la siguiente:
«Lucha en barro femenina – Deporte Olímpico YA!»

PD: La redacción de «Tengo un amigo que» está completamente de acuerdo y afirma que seguiría las retransmisiones televisivas de dicho evento.
PD2: Estamos seguros que las casas de apuestas están de acuerdo también, esto generaría altas fuentes de ingresos.

Reivindicaciones (II)

Saint nos envía la reivindicación siguiente:
Yo tengo un amigo que quiere reivindicar:
Mujeres de España, lleváis siglos luchando por la igualdad. Ahora que la tenéis, os aprovecháis de la discriminación positiva para entrar GRATIS en las discotecas. ¿dónde c*ño están vuestros principios ?

Ups, si se me ha ido la mano…

Tengo un amigo que suele cortarse el pelo con maquinilla en su casa. Un día su novia le preguntó si le gustaría que fuese ella quien le cortase el pelo, y mi amigo, ingénuo de él, accedió. La primera y la segunda vez no ocurrió nada «raro» pero la tercera vez hubo un pequeño desliz.
La novia de mi amigo «olvidó» poner el adaptador a la máquina y en la primera acometida dejó sin nada de pelo a mi amigo. Este, al ver la mata de pelo que había en la máquina de buenas a primeras se dió cuenta del pequeño desliz de su novia.

Esto provocó que mi amigo tuviera que cortarse el pelo al 1, quedándole una cabeza bastante…despejada.

Así que amigos y amigas, temed de vuestras novias si no queréis parecer bolas de billar 🙂 [o id al peluquero]

Merluzo de Piscina

Tengo un amigo que le ha cogido el gustillo a esto de ir a nadar después del trabajo. Y como le ha dado fuerte, va dos o tres veces a la semana. En una ocasión, al salir de la piscina e ir a los vestuarios para cambiarse, vió a un socorrista, cizalla en mano (pedazo de cizalla!), golpeando a muerte un candado enorme, ante los ojos atónitos del resto de espectadores, y un pobre zagal al cuál sólo le faltaba sollozar por la paliza que le estaban dando al candado. Había que ver cómo, el pobre socorrista, daba el máximo de sí ante semejante cacho de candado. Mi amigo me cuenta que lo consiguió, no sin dejarse la piel en el intento.
Muchos pensarán: pobrecico, se le ha caído la llave mientras nadaba…
Pues no. El muy merluzo había olvidado la llave dentro de la taquilla.
Muchos pensarán: Madre mía qué vergüenza debió pasar…
Pues no. Cuando el socorrista le ganó la batalla al padre de todos los candados, enseñó en alto con señal de victoria su llavero diciendo: Aquí están! Con la otra, enseñaba su DNI para demostrar que sí, era su taquilla, mientras decía: «Se me parece el del DNI eh?». Si le adjuntamos su voz, su risa y la cara de merluzo, entendemos perfectamente la causa por la cuál el socorrista miraba impotente a su cizalla (yo le habría golpeado la cara con la misma fuerza con la que le había golpeado al padre de todos los candados).

Reivindicaciones (I)

El otro día se reivindicó el hecho de tener secretarias buenorras en las oficinas de trabajo. Pero necesitamos ir más allá, y tal reivindicación nos hizo pensar. Vamos a crear una sección de reivindicaciones con nuestras peticiones, porque todos tenemos un amigo que quiere reivindicar algo.

Bueno, pues este es vuestro sitio!
Esperamos vuestras reivindicaciones 🙂

Sustitut@s

En la vida, como en el fútbol, el sustituto debe ser (excepto casos extremos) parecido al jugador que estaba en el campo. Salvo casos extremos como que tu equipo venga de encajar un gol y no quede tiempo, o acabas de meter uno y te la juegues al catenazzo.
Pero en mi empresa estamos en una situación normal, aunque la secretaria (la buenorra) ha encontrado otro puesto donde le pagan más y se pira. Así que la empresa busca sustituta, y la encuentra. Vamos a ver, que la chica parece simpática y no es un «No_Hombre», pero a nosotros no nos vale. Queremos más.

De siempre se ha sabido que una secretaria tiene que estar buena (somos animales y pensamos como tales). En el caso de haber dos, una tiene que estar buena aunque no sepa hacer la O con un canuto, y la otra, algo menos estética, debe ser eficiente. Ahora, lo que no es justo, es que ahora las dos sean eficientes.
Encima que no tenemos derecho a huelga, con un segundo año de congelación de salarios y sin climatización, lo que no nos pueden hacer también es quitar el único «brote verde» que nos quedaba!
Qué será de nosotros?

Pillas la indirecta?

Hace mucho tiempo que no hablamos de Hombre-Erasmus, el zagal dice estar «ocupado» con sus temas y estudios. Pero el otro día llegó a nuestra redacción con una historia caliente que le acababa de pasar hacía poco tiempo.
Antes de los exámenes (ya sabemos cómo pica durante esas fechas) Hombre-Erasmus (que sigue viviendo en la residencia de estudiantes) intentaba flirtear con una Belga_Von_Tetonen. El caso es que Hombre-Erasmus le propuso «ir a ver una película», tal que Hombre-Erasmus pone las palomitas y ella pone la habitación y la peli. Bueno, para compensar que Hombre-Erasmus sólo ponía una cosa, se guardaba un «as» en…el bolsillo, porsifo.
Hombre-Erasmus, puntual, llega a la habitación de la belga, casi sin iluminación…genial. Le pregunta dónde sentarse y esta le indica la cama (esto va bien). Ella pone la película y se sienta…EN UNA SILLA A 3 METROS DE HOMBRE-ERASMUS! Esto descompone a Hombre-Erasmus, el cual insta a la belga a sentarse junto a él, pero esta desestima el recurso.

Hombre-Erasmus cree que alguien no pilló la indirecta…

Mi segundo triatlón

Siempre han dicho que las segundas partes nunca fueron buenas. En el caso de mi amigo fue algo mejor, pero tuvo sus destellos cómicos, por supuesto.
Mi amigo se dispuso a hacer su segundo triatlón, sólo dos semanas después del primero y con la lección bien aprendida, así que el día de antes preparó los materiales necesarios para la carrera, esta vez eligiéndolos un poquito mejor. Se lo dejó todo preparado para «llegar y poner».
Llega la carrera. Comienza la natación y el tío baja en 4 minutos el tiempo de la pasada edición (de 14′ a 10′ los 500 metros). Aquí la transición era más larga (el primero la hace en unos 4 minutos, cuando en la otra edición en 1 minuto raso la hacía). Mi amigo llega a la zona de transición lo más rápido posible, se quita la combi, se viste y cuando se va a poner el dorsal, este sale disparado. Va como loco a buscarlo y se da cuenta de que está roto.
Oh, qué bien, sin dorsal no se puede seguir. Y el tiempo sigue corriendo…
Finalmente encontró el modo de hacer un agujero y pasar una goma de reserva que se guardó…y el tiempo sigue corriendo…
Total, 8 minutazos de transición, ahí, con un par!
El tío siguió contra viento y marea hasta terminar la carrera. Lo mejor era ver las fotos. Todo el mundo con su dorsal colocado bien y mi amigo con el dorsal a la virulé.

Venga amigo mío, a la tercera irá la vencida. Queremos que te pase algo más escatológico para poder contarlo aquí 🙂